Suelo no recordar los sueños o pesadillas nocturnas pero cuando lo hago son con todo lujo de detalles. Pero son las menos, pocas veces. Lo que sí es algo recurrente es el soñar en que soy vendedor de ropa. De hecho lo fui en la vida real y lo sufrí también, por eso lo de recurrente imagino.
Como ejemplo de mis pesadillas recuerdo a mi jefe decirme enojado, casi gritándome, una vez:
-“¡No quiero que vendas lo que hay en el local, sino lo que no hay!”
Nunca había que decir que no había algo. Para ello se recurría a estirar las prendas, cambiar etiquetas de talles, prometer cosas irrealizables y todo lo necesario para engañar y que la gente lleve... lo que sea.
Sé que no soy Gandhi ni estoy cerca, pero no nací con el carácter para ese trabajo…
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domingo, 30 de septiembre de 2018
jueves, 27 de septiembre de 2018
lunes, 24 de septiembre de 2018
Miguel Angel Brindisi, el gran ídolo del barrio
Digo ídolo en singular pero en verdad Brindisi unificó a dos: La Boca y Parque de los Patricios. O mejor dicho unificó a Boca y Huracán, mis dos clubes/ barrios de amores.
Pocos saben o pueden adivinar que por la calle Brandsen donde se asienta la pintoresca Bombonera se puede llegar por ella sin cortar la continuidad ni desviarse un solo metro a la calle Amancio Alcorta, donde se encuentra El Palacio Ducó, la así llamada cancha de El Globo. La casualidad o causalidad los une, como el mismo Miguel.
Éste señor del que tanto hablamos para muchos fue el mejor ocho que pisó alguna vez una cancha Argentina. imaginen el disfrute de todos los quemeros y bosteros que lo vieron jugar con sus camisetas.
Su distintivo era una una buena pegada por su clase exquisita y eso que no era zurdo que luce más sino un derecho virtuoso. Le sumaba el ser el organizador solidario y con gran visión de juego. Fue ídolo donde pasó como en Las Palmas de España donde fue homenajeado.
Jugó con nuestra selección un mundial y luego fue técnico exitoso. Compartió cancha con gente como Babington, Maradona, Houseman y Gatti. O más bien ellos tuvieron la suerte de jugar con él.
No desentonó ni en el Boca campeón de Maradona, aunque para todos la verdadera figura de ese logro fue él más que Diego (y no estoy blasfemando).
Pocos saben o pueden adivinar que por la calle Brandsen donde se asienta la pintoresca Bombonera se puede llegar por ella sin cortar la continuidad ni desviarse un solo metro a la calle Amancio Alcorta, donde se encuentra El Palacio Ducó, la así llamada cancha de El Globo. La casualidad o causalidad los une, como el mismo Miguel.
Éste señor del que tanto hablamos para muchos fue el mejor ocho que pisó alguna vez una cancha Argentina. imaginen el disfrute de todos los quemeros y bosteros que lo vieron jugar con sus camisetas.
Jugó con nuestra selección un mundial y luego fue técnico exitoso. Compartió cancha con gente como Babington, Maradona, Houseman y Gatti. O más bien ellos tuvieron la suerte de jugar con él.
No desentonó ni en el Boca campeón de Maradona, aunque para todos la verdadera figura de ese logro fue él más que Diego (y no estoy blasfemando).
Hoy es un hombre querido en el ambiente futbolero que sigue la docencia editando un libro sobre su vida e historia y dando cátedra en cualquier entrevista que uno lo escuche.
Salud MAESTRO!!!
Salud MAESTRO!!!
jueves, 20 de septiembre de 2018
Canciones olvidadas 4 / Candy Dulfer, BBM, Bjork
Me propuse rescatar canciones del arcón de mis recuerdos, de mi olvido. Temas de bandas o solistas que no son de mis favoritos y que quizá tampoco fueron un hit pero que disfruté mucho en su momento. Luego por cosas de la mente terminaron arrumbadas en algún lugar de mi memoria. Un día y sin saber el por qué regresan de forma casual -linkeadas en algún Youtube en general- y las vuelvo a (re)encontrar atractivas, tan disfrutables como antes.
Hoy tres canciones que no tiene nada que ver entre sí pero como la idea inicial, de forma tan anárquica como fascinante. Comencemos:
Candy Dulfer
Exquisito es el único adjetivo que se me ocurre con justicia para esta canción de una saxofonista (amiga de Prince) bastante invisible que con la producción y el acompañamiento de David Stewart -la mitad de Eurythmics- logró hacer volar un poco más su música, su saxo y su imaginación. Un duelo de vientos y guitarra... si, exquisito.
BBM
Son las iniciales de tres vejestorios (Bruce, Backer, Moore) que fueron parte de bandas legendarias en los 70 (como Cream) y que se unieron para hacer un discazo. Este fue el primer corte de ese disco sólo para músicos, donde el tono dramático y melancólico de la voz y de la música me encantaron y me hicieron comprar el cd en su momento.
Bjork
Una chica siempre difícil de escuchar y hasta podríamos tildarla de rara, muy extraña. Su música nunca invita al pasatismo y por eso también sabemos de que es (muy) buena. Solo nos queda prestarle atención cuando saca algún disco (y tiene su estilo propio que no es poco). En este caso su encantador video y su canción (no, tampoco es un hit pero casi que sí gracias a la antigua MTV), invitan a quererla un poquito más.
Para ver más recuerdos:
- Canciones olvidadas 1
- Canciones olvidadas 2
- Canciones olvidadas 3
martes, 18 de septiembre de 2018
Cumpleaños
No estoy hablando otra vez del cumple blog sino que tan solo cinco días después de eso es mi propio cumpleaños. Coincidencia de la vida o quizá no tanto. Nada es casual en ella.
Es un buen momento personal a pesar de algunas cosas que tiran para abajo. Como siempre digo, no se puede todo en la vida. Pero el balance es positivo y eso me pone contento. Muy.
No es poco eh.
Estoy a solo un año de cumplir 50. Y es movilizador ya solo por el número.
49 es la carne en la lotería. De carne somos.
Es un buen momento personal a pesar de algunas cosas que tiran para abajo. Como siempre digo, no se puede todo en la vida. Pero el balance es positivo y eso me pone contento. Muy.
No es poco eh.
Las tres maravillas
Estoy a solo un año de cumplir 50. Y es movilizador ya solo por el número.
49 es la carne en la lotería. De carne somos.
Cuando El Arte Ataque
miércoles, 12 de septiembre de 2018
12 el 12
Hablo tanto por la situación de blogger que sigue año a año sumergido un poco más en su decadencia (Frodo no opina lo mismo), como por la situación lamentable que está pasando nuestro país con un presidente nefasto que quizá merecemos (para los extranjeros amigos sepan que se llama Mauricio Macri). Imposible el estar ajeno a lo que vivimos día tras día donde todas son malas noticias casi sin excepciones.
Hablo de política porque gracias a un comentario de Nilda de hace algún tiempo donde describía los intereses de su vida a través del tiempo, me hizo reflexionar sobre mí y mis etapas que se pueden dividir en tres. Una primera en la pre-adolescencia marcada por el fútbol que lo dominaba todo. Una segunda donde el interés pasó por la música (las mujeres acomáñan las tres por eso no las menciono). Y una tercera y creo ya final, terminante, donde el transito de la madurez pasa por una seria preocupación política.
Dejando de lado la protesta y la queja porque esta no deja de ser una entrada festiva (?), para amenizarla un poco se me ocurrió buscar que canción era la número uno cuando nació este blog allá por ese lejano 12 de septiembre del 2006 y era ésta que les dejo. No está nada mal para representar al blog y a mí mismo eh.
JUSTIN TIMBERLAKE - SEXY BACK
En fin, no quiero dejar de agradecerles como siempre por estar y hacer de este mi lugar algo mucho mas ameno y perdurable. En nombre de mi querido blogger amigo Manolo hago extensivo un abrazo grande a todos ustedes y por muchos años más por acá (se lo merece además je)...
lunes, 10 de septiembre de 2018
Un poco de humor
Coherencia
¿Cuántas probabilidades hay?
me gusta vivir al límite
Mi vida
Fuck you internet
domingo, 2 de septiembre de 2018
Los relojes y Julio Cortázar
Los relojes de muñeca también me parecen hermosos y tuve varios pero no me duran nada puestos. Incomodidad, el quitarlo para bañarme y que no se moje, un olvido en la mesita de luz, cualquier cosa sirvió de excusa para sacármelo y no volver a usarlo. No sé el por qué pero sucede. Muy parecido al no usar paraguas por olvidarlo en cualquier lugar y momento posible.
Julio (¿que Julio va a ser?), nos decía algo parecido en uno de esos mini cuentos costumbristas y surrealistas que tan bien le salían y que tanto les gustaba hacer.
Instrucciones para dar cuerda a un reloj
Por Julio Cortázar
Piensa en esto: cuando te regalan un reloj te regalan un pequeño infierno florido, una cadena de rosas, un calabozo de aire. No te dan solamente el reloj, que los cumplas muy felices y esperamos que te dure porque es de buena marca, suizo con áncora de rubíes; no te regalan solamente ese menudo picapedrero que te atarás a la muñeca y pasearás contigo.
Te regalan -no lo saben, lo terrible es que no lo saben-, te regalan un nuevo pedazo frágil y precario de ti mismo, algo que es tuyo pero no es tu cuerpo, que hay que atar a tu cuerpo con su correa como un bracito desesperado colgándose de tu muñeca.
Te regalan la necesidad de darle cuerda todos los días, la obligación de darle cuerda para que siga siendo un reloj; te regalan la obsesión de atender a la hora exacta en las vitrinas de las joyerías, en el anuncio por la radio, en el servicio telefónico. Te regalan el miedo de perderlo, de que te lo roben, de que se te caiga al suelo y se rompa. Te regalan su marca, y la seguridad de que es una marca mejor que las otras, te regalan la tendencia de comparar tu reloj con los demás relojes.
No te regalan un reloj, tú eres el regalado, a ti te ofrecen para el cumpleaños del reloj