Algunos extranjeros se asombran con el colorido de los cielos en los atardeceres de Buenos Aires. Yo los disfruto de la misma manera porque si hay algo que me gusta es fotografiarlos y en especial el detalle de sus nubes, que llevan la misma fantasía. Es que rara vez se ven dos cielos iguales por aquí.
Aquí les dejo diez ejemplos de esa belleza que sorprende cada vez que se mira hacia arriba, en cualquier punto que uno este parado en esta bella ciudad.
Una única nube parece cubrirlo todo.
Y la extrañeza de los edificios conviviendo
con las palmeras.
Parece el campo y es en plena ciudad
Parecen dos cielos distintos con el del reflejo
en la base del monumento a la
heroína boliviana Azurduy
Desde el tren, sin nubes y con tono encantador
20 segundos antes o después,
la foto es muy distinta a ésto
No pude evitar el sacar una foto de este
extraño cielo "interrumpido"
La creación de Lola Mora cubierta
de tonos femeninos
Pasando sobre un puente en colectivo,
esta foto en movimiento de El Riachuelo
La vecina Bombonera hogar de Boca Juniors
siempre presente en el blog
Y Margarita claro que también...
BONUS TRACK
En día de lluvia intensa así se ve el lado B
de la ciudad desde la ventana del trabajo.
Aún en ausencia, el cielo se disfruta.