28 junio 2008

EL SUEÑO DE CASSANDRA - Woody Allen



          El currículum le juega en contra a Woody Allen. Toda nueva obra va a pasar por el filtro de su genial y despareja filmografía. Porque existen varios Allen.

El de las obras maestras, el de las comedias ingeniosas-geniales, el dramático y el mainstream. El que hace las cosas ya de taquito con el resto de ideas y de talento que va quedando luego de 40 películas propias.

Pero Woody aún en su vejez casi senil sabe narrar como pocos hoy en día. Entonces Cassandra’s Dreams se hace un paseo por el más rústico y amargo Woody posible. Y a la vez, uno auténtico, fatal, mediocre y también genial.

Hasta me atrevería a decir que este es un nuevo director que cuida la fotografía y el ritmo como nunca (no hay tiempos muertos en sus últimas películas ni en esta) y que evita calcar su personalidad en algún personaje para que nos sea mas digerible su ausencia en pantalla (aunque Collin Farrell balbucee o que mencione en un momento que toca la trompeta no alcanza para calificar).


           Gran director de actores, las elogiadas actuaciones de los protagonistas son solo monocordes aunque convincentes, especialmente en el caso de Farrell tan afecto a personajes extrovertidos y no a este disminuido hermano menor de la familia.

Quizás el valor real de Allen aquí es la elección del cast (los hermanos tienen química) y el haber hecho actuar convincentemente al nombrado Collin.

La verdadera clase de actuación con carácter la da el veterano inglés Tom Wilkinson (El que se hiciera famoso desvistiéndose en The Full Monty) en un secundario que es un eje virtual de la película.



         Los diálogos es el fuerte del director y aunque se tornan perezosos no desentonan. La vuelta final -previsible por el desarrollo- no es sorpresa si recordamos el truco eficaz –por la temática y resolución- de Match Point (película preferida de los no-fans).

En fin, siendo yo sí un fan del director ya no le pido excelencia o ni siquiera que llegue a rozar sus puntos máximos como artista. Por eso Cassandra’s Dreams me resulta una buena película "Woody Allen".

Y todavía se da el lujo de que sigamos unos minutos más luego de la proyección pensando en el dilema moral planteado.

     Y eso ya es mucho en el cine de hoy.

24 junio 2008

ANDRES CALAMARO - TOP 5 ALBUMES

 
       Similar al boom Sabina en nuestro país, Calamaro siempre está en su punto caramelo de popularidad.

      Aclamado tanto aquí como en España, se suceden los homenajes para alabar su música, su figura y su talento. La comparación con el andaluz se puede dar por las letras , Andrés es más melodioso en comparación aunque menos rockero que antes.

          Su figura ya integra el panteón de los grandes solistas argentinos junto a Charly García, el Flaco Spinetta y Fito PáezSin un orden aparente y sin contar su etapa con Los Rodríguez, aquí les dejo mi personal visión de los mejores 5 discos de la extensa carrera solista de Andrés Calamaro:





    NADIE SALE VIVO DE AQUI

      Disco de clima maldito de cuando Calamaro ni siquiera soñaba con ser popular. El pop para corazones destrozados de Andrés encuentra un equilibrio entre lo correcto y lo bizarro, con citas a su amado Bob Dylan (Dos Romeos) y Tom Waits (la increíble Vietnam).

      Para escuchar luego de medianoche y un poco aturdido, disfrutable de principio a fin, tan impopular como maldito.



    ALTA SUCIEDAD

        Su álbum más redondo, prolijo y con canciones no por ello menos valiosas. Si uno tendría que mostrar un solo disco de Calamaro elegiría este por lo redondo, por el impacto y por su éxito comercial.

      Luego vendría el exceso y discos extra largos en duración sin una edición aparente por parte de Andrés.


    VIDA CRUEL

         El Piano Bar de Calamaro. En medio de las luces de neón de los 80's, realiza un disco intimista, quizá demasiado oscuro para lo esperable. "Estoy perdido y no sé por qué".

      Invitados de lujo como Richard Coleman, Gonzo, Roberto Pettinato, Samalea, Stuka y el lujo de que en el tema Vi la raya le hagan coro a dúo García y Spinetta. Todo dicho. Discazo.



    HONESTIDAD BRUTAL

         Aquí empezó a asomar la verborragia Calamaro, álbum doble y desparejo, con temas desencantados de amores rotos. Bah, lo mismo de siempre. Invitados de la magnitud de Pappo, Mariano Mores o Maradona lo hacen mas irreal todavía.

      En este disco esta todo  lo que aumentado y exagerado hacen que queramos tanto a Andrés.



    HOTEL CALAMARO

        Post Abuelos de la Nada, pop de plástico en época alfonsinista, ultra kitsch, más cerca de Los Twist que de Fito. Querible.

      Canciones que parecen jingles y una rara habilidad de artesano pop.  Una canción como Otro amor en Avellaneda en otro artista sería casi risible, en Andrés es casi signo de genialidad.


15 junio 2008

LENNY KRAVITZ y SHAKIRA

         Sí, no enloquecí, Kravitz y Shakira tienen algo en común pero no es lo que piensan sino un video. Todos señalan a Lenny como un ladrón de guante blanco ante el primer riff de guitarra reconocible, pero nadie dice nada cuando el robado es él.

          Las imágenes de Are you gonna go my way? lo catapultaron como estrella rocker y el video de Mark Romanek hizo estragos en la MTV. Si no creen de su influencia miren el video de la simpática lartista colombiana Shakira.

          Con ritmo deudor del High & Dry de los Radiohead (doble hurto entonces), el escenario y la estética del clip es casi un calco del de Kravitz. Si tomamos en cuenta que la canción hábilmente es nombrada "Inevitable", casi que la perdonaríamos.





         Ahora, si nos damos cuenta de que el disco que contiene este tema se llama "¿Dónde están los ladrones?", vemos que la Shaki en verdad... nos está cargando.