Estaba pactado con mi amigo periodista, èl le hacía la nota en la Feria del Libro y de paso me sacaba una foto con ella...
¡¡Con Natalia Oreiro!!
Luego del evento y del hecho en sí, desandamos el camino de vuelta y reviso mi teléfono casi con desesperación para ver como saliò y noto que mi amigo no me sacó la foto, sino que grabó un video de... un segundo.
El error de mi amigo Hugo, pensándolo bien, no fue ningún error. Nunca buscado (me invitó él con generosidad), se dió de estar con ella, mi musa preferida de siempre aunque sea un segundo juntos. .... y se apoyó en mi hombro...