Un año explosivo, intenso, conflictivo, casi irreal y no siempre positivo fue este extraño 2012. Siempre hablando de forma tanto personal como artística. Para eso es un blog ¿no?

Estrenaron Gricel, un documental con la historia de la canción que tanto me fascina, algo increíble para mí, nunca pensé que se iba a realizar un film sobre este tema. Y sin ser una maravilla es digna. Y la ví con Gricel , mi hija, ¿que mas puedo pedir no?
Por otro lado se nos fue el que mejor miraba por la lente, el irrepetible (por lo genial y tan, tan argentino) Leonardo Favio. Lo consideraba de verdad un grande y lo admiraba, desde ahora va a estar en mi altar personal.