domingo, 21 de enero de 2007

STEPHEN CHOW - Kung Fusion 2004

          Stephen Chow es luego de siete películas el hombre del cine en China. La popularidad lo hizo estrella aunque hay que reconocer que en sus films es el director, productor, guionista y cerebro detrás de su producto.

          Como lo hacían también las viejas glorias como Charles Chaplin y Buster Keaton. Y a ellos es justamente a quienes homenajea Chow con sus comedias frescas y danzantes. Con él volvió el slapstick, forma física de hacer humor. Primitivo y anárquico, ideal para las piruetas del kung fu, un caos creativo en cadena esta Kung fusion.

          Ojo, Chow muestra cuidado de la estética y forma tanto en los encuadres como en el montaje y nos hace acordar de otra de sus influencias directas: Stanley Kubrick.

          Notable en la escena inicial y en ese interminable travelling hacia atrás. En la anterior Shaolin Soccer, es el comienzo con la pelota de fútbol y una cabeza de shaolin "alineadas" como los planetas famosos de 2001 al son de la música clásica. Aquí en Kung Fusion hay una obvia referencia a El Resplandor. Cinefilia pura. Y respeto por los clásicos.

          No es ninguna sorpresa porque Shaolin soccer (2001) fue una comedia delirante y mostraba toda la imaginación que Kung fusion confirma. La sorpresa en verdad es que Chow se supere, lo que en este caso convierte a su último film en una obra maestra. Un humor absurdo que lo emparienta con el español Javier Fesser, creador de las excelentes El milagro de P. Tinto (1998) y Mortadelo y Filemón (2002). Es decir, un chino y un español como máximos referentes de este género. Ja.

          El ejemplo más exacto de lo que pueden ser las películas de Chow lo da el crítico Roger Ebert del Chicago Sun Times que dijo"Imagine un film donde Jackie Chan y Buster Keaton se reunan con Quentin Tarantino y Bugs Bunny".

         De hecho, las escenas coreografiadas de lucha, fuero
n hechas por el mismo equipo de esa fallida parodia oriental llamada Kill Bill (y también las de Matrix). Ambas imitaciones pobres de la cultura oriental. De paso y sin quererlo, deja al ahora hollywodense Jackie Chan un poco vetusto y al borde del retiro. Y aquí se nota la diferencia, ya que cualquiera de las varias peleas de Kung superan sin despeinarse, a la grandota, central y numerosa de Kill Bill. Solo se las podría comparar en destreza e imaginación, con alguna de la serie animada Dragon Ball Z.

          Relatar los gags -que son cientos- no solo sería aburrido sino imposible. El guión, con personajes entrañables y sin caer en la temida cursilería, es un poco más simple. La lucha de la gente común contra la mafia, sin entrelíneas. Diversión pura e inteligente. Hasta el propio Chow se mantiene en un segundo plano en todo el film a pesar de ser el protagonista.

          La escena de la persecución -digna de cualquier capítulo de El Correcaminos-, la lucha con los músicos, y la batalla final, son los puntos altos de una película con un ritmo sostenido, redondísima, con excelentes actuaciones de en su gran mayoría gente mayor -algunos actuaron en Operación Dragón de Bruce Lee!-, con romance, acción, humor y sin puntos flojos. ¿Algo más?.

         Buster Keaton desde algún lugar del cielo y después de ver Kung Fusion, estará sonriendo...






4 comentarios:

  1. curioso... aunque no es mi género definitivo, pero será difícil encontrar algo de chow, no?
    un abrazo.

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  2. es una de las frikadas orientales que tengo pendiente de ver. Gracias por la información

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  3. Me gustó. La vi más de una vez, cuando la dieron por Telefe.
    Interesante el personaje que falla como heroe, como villano. Pero se va descubriendo que tiene algo especial, como la velocidad que se recupera.

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    Respuestas
    1. recuerdo que estuve fascinado con esta película... después le perdí el rastro a Chow, creo que hizo películas mediocres.. una lástima....

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