miércoles, 29 de marzo de 2017

La muerte 💀 de los blogs






 
       Me alarma eso, la constante lectura de que los blogs están muriéndose, que los abandonan, que les queda poco, que la plataforma tiene sus horas contadas. ¿Será cierto? 😞


          Lo comencé como un hobbie, por ganas de escribir. Hoy lo considero indispensable para mi expresión y no sólo por eso: mi deseo egocéntrico es que me sobreviva para que lo lean mis hijas, para que me conozcan un poco más todavía. Hablando (escribiendo) de lo que sea, se habla de uno también.

          Odiaba a los blogueros que se pasaban a Facebook primero y luego a Twitter por moda y los descuidaban, hasta que caí yo en la trampa con el Instagram. Hoy sé que blogger es la mejor manera de expresión posible porque los contiene a todos. Imagen, video y texto sin límites. ✌

          Me resulta muy fácil y hasta cómodo subir una foto 📷 en instagram con un título ingenioso, pero no tanto el hacer una entrada con una idea, con un sentido, con un sentimiento.

          Perdón blogger por la flaqueza, acá estoy y te banco. El día que los malos augurios tengan razón y desaparezcas también se irá un pedacito mío con vos... 😢


viernes, 24 de marzo de 2017

La cuadra de mi infancia en Lanús


         Con mezcla de melancolía y nostalgia recorrí el barrio de mi infancia con inicio desde mi ex colegio. Mi infancia fue mi casa y la escuela y las calles de mi barrio. Mis abuelos estaban en el lejano Palermo visto desde ese gris Lanús.

         Al volver a mi ex casa me chocó el hecho de ya no ser lo que era. Un frente de chalet reemplaza la fachada anterior y me resulta extraño, ajeno. Me sorprende que la distancia inmensa entre esquinas de mi niñez hoy ya no lo sea tanto. Más que pequeña o menos ancha la siento triste, menos infantil, detenida en el tiempo. La misma rotura de calle en la esquina me provoca mas cariño que dejadez urbana.

          El placer de recordar ese verdillo que se formaba en los cordones donde hacía patinar la rueda trasera de mi bicicleta hasta caer. Veo que hasta hoy nunca supe bien el nombre de mi calle. Recordaba clarito que era D'Elia y ahora me vengo a enterar que es "de Elía".

         En este lugar crié mis filias y fobias. Viví más en la calle que dentro de casa. Empecé a amar a los animales, a la música, a las mujeres. Acá aprendí mucho de lo que sé.

         
Y me doy cuenta que fue un lugar donde fui muy feliz.





lunes, 20 de marzo de 2017

los libros 📚 y el leer






 
        ¿Se leen libros? Al parecer las librerías no disminuyeron pero dudo que la respuesta sea categórica y menos aún, optimista. S
in entrar en la discusión entre "papel o pantalla", valoro el descubrimiento de hace unos días no por lo original sino por lo necesario. Así como vi en una ventana un muestrario de abrigos para que se sirva el necesitado, en otra invitan a retirar un libro para que el arte circule.

          Necesario decía porque los libros en Argentina son carísimos y porque éstas iniciativas de buena leche contagian. Temí en un momento pasar compulsivamente a diario para llevarme todo pero el positivismo penetra y hace que uno colabore más de lo que retira.

          Revistas, suplementos de diarios, me hice de un mapa de la capital tipo Filcar pero antiguo (gracias máster por dejarlo 👌😉). Mi mérito por ahora fue que alguien quizá se hizo fan de Prince por mi colaboración😁.

          Me gusta, me encanta mi barrio.